San Félix.-El verdugo de Jesús Enrique Cedeño Fernández, de 32 años, ya lo tenía precisado. Apenas lo vio comenzó a dispararle.
Alias el Chuchín estaba reunido con un grupo de amigos en la calle principal de la Ruta I de Vista al Sol, cuando fue asesinado, eran aproximadamente las 11:30 de la mañana de este sábado.
Luego del crimen, el homicida corrió hasta la zona boscosa. Desde ese instante era “vigilado” por los compinches de el Chuchín.
Por varios minutos el delincuente permaneció oculto entre la maleza, hasta que se vio acorralado. La versión de los testigos refiere que para intentar escapar el sujeto sacó su arma de fuego y comenzó a disparar.
Aunque corrió, justo frente al autolavado su pistola dejó de soltar balas. En ese momento quienes rodeaban el cadáver del el Chuchín lo atraparon.
Le dieron más de tres balazos en la cabeza. Cuando se desplomó, lo golpearon con palos y piezas de concreto.
Además, lo decapitaron con un cuchillo, luego le rociaron gasolina y lo incendiaron. El cuerpo quedó en medio de la calle. En el sitio nadie quiso identificarlo, solo se supo que el individuo, de aproximadamente 25 años, era de Puerto La Cruz.
Alerta
Con el sonido de las múltiples detonaciones y los gritos de auxilio, los vecinos salieron de sus hogares, para saber lo que pasaba. En menos de 10 minutos la calle se llenó de curiosos, “vieron lo que le paso al que mató a el Chuchín”, era lo que murmuraban.
El cadáver de el Chuchín fue cubierto con una sábana blanca, mientras que el de su verdugo quedó expuesto a los residentes y conductores.
A través de una llamada, los funcionarios de la Policía del Estado Bolívar fueron notificados, el mensaje fue claro: hubo un enfrentamiento entre bandas.
Rápidamente una comisión adscrita a la Brigada Motorizada del Centro de Coordinación Policial Ramón Eduardo Vizcaíno, acudió hasta la escena del crimen.
Los oficiales resguardaron el lugar hasta la llegada de los expertos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas.
Otra versión
La mamá de el Chuchín dijo que su hijo fue asesinado para robarlo. Según el relato de la mujer el occiso fue interceptado por tres sujetos.
Cuenta que el trío, portando armas de fuego, lo obligó a entregar las llaves de su vehículo, un Chevrolet Corsa, de color gris, además de llevarse su teléfono celular y el resto de sus pertenencias.
La señora recordó que el Chuchín era el menor de dos hermanos y padre de dos niñas. Trabajaba por su cuenta. Vivía en el sector Inés Romero.
Sin embargo, las declaraciones de la mujer fueron desmentidas por quienes residen en el lugar, quienes aseguran que ambos caídos eran integrantes de grupos delictivos que operan en el zona.
Los testigos agregaron que el Chuchín no se desplazaba en ningún carro. Dicen que estaba en una vivienda al lado del autolavado cuando lo tirotearon, “seguro se le durmió la mosca”.
Pasadas las 12:00 de le mediodía arribó la comisión adscrita al Eje de Homicidio de la policía científica para realizar el respectivo levantamiento.
Todavía uno de los cadáveres tenía candela, así que con ayuda los agentes le rociaron agua para apagarlo.
Chequeados
Los expertos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas esperan la llegada de los parientes del sujeto decapitado para su identificación. Los datos de ambos caídos serán chequeados a través del Sistema Integrado de Información Policia, para conocer si poseen registros o solicitudes.
DP/Autor: Yusbeyris Letidel
Comentarios: