La vicepresidenta de la República Bolivariana de Venezuela, Delcy Rodríguez, expresó un firme rechazo a las políticas del gobierno de Guyana, tras la firma de una Declaración de Intención de cooperación militar entre Georgetown y Washington. Rodríguez denunció que este acuerdo constituye un intercambio militar a cambio del petróleo venezolano robado, entregado por el presidente guyanés Irfaan Ali a los intereses expansionistas de Estados Unidos.
“Doscientos años después, los agentes de Monroe siguen reclutando políticos serviles que traicionan a sus pueblos por una palmada en la cabeza. Irfaan Ali no podía quedar por fuera: entrega el botín robado a los imperialistas tocando tambores de guerra. La historia los condenará. Venezuela reivindicará su gesta independentista y vencerá”, afirmó Rodríguez.
El acuerdo fue firmado este martes en la Casa de Gobierno de Guyana, tras una reunión entre el presidente Irfaan Ali y altos funcionarios del Departamento de Guerra de Estados Unidos: Patrick Weaver, asesor principal del Secretario de Guerra, y Joseph Humire, subsecretario interino para Asuntos del Hemisferio Occidental. La embajadora estadounidense en Guyana, Nicole Theriot, también participó en el encuentro.
Según la Oficina del Presidente guyanés, el documento reafirma la “asociación de seguridad de larga data” entre ambos países y se enmarca en la estrategia estadounidense denominada “Lanza del Sur”, cuyo objetivo es ampliar las alianzas militares en el hemisferio occidental y reforzar el compromiso con las naciones de CARICOM.
Ali aseguró que la declaración no implica un nuevo despliegue de tropas estadounidenses en Guyana, sino la continuidad de la cooperación en defensa y seguridad.
Para el gobierno venezolano, este pacto representa una traición a la soberanía regional, pues convierte a Guyana en plataforma de intereses militares extranjeros a cambio de recursos energéticos que pertenecen legítimamente al pueblo venezolano.
Rodríguez subrayó que la maniobra de Washington y Georgetown es parte de una política de agresión que busca desestabilizar la región y desconocer los derechos históricos de Venezuela sobre el territorio del Esequibo y sus recursos.
El gobierno bolivariano reafirma que, tal como en las luchas independentistas de hace dos siglos, el pueblo venezolano defenderá su soberanía frente a las pretensiones imperialistas. “La historia los condenará, y Venezuela vencerá”, concluyó la vicepresidenta.









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